lunes, 27 de diciembre de 2010

esta noche

.
Estoy muy triste porque
tú no eres de este mundo.

Si fueras tú
viviera
en ti, muriera
en ti y contigo.

Duérmete, ya me callo,
oh, blanco celador.



30 comentarios:

SIL dijo...

Despierta ya de esta pesadilla y ponete a soñar con musas de este mundo ;)
Es una orden, Poeta.

SIL

Jose Zúñiga dijo...

Incurro en desacato muy a sabiendas. Hay noches como esta, Sil.
Bs

Isolda Wagner dijo...

No hay otros mundos, Jose, hay maneras de vivir éste, que es le que no has tocado. Así que sueña.
Todos los besos.

Charcos dijo...

tu incurre en desacato o en lo que te salga de los destiempos, yo seguiré disfrutando leyendo.

habrá madrugada? o ya será esta mañana?

ale besicos

Horacio Holiveira dijo...

Esta noche había más noche tras la noche.
Es curioso porque "esta noche" incluye dos noches en la misma. Esta noche puede ser (indistintamente) la noche que viene o la que ha pasado, todo depende del contexto. Pero como en un título no cabe el contexto... me ha llamado la atención.
Un gusto leerte :D

Amelia Díaz dijo...

Cuento contigo en mi nueva andadura, poeta.
Espero que sigas conmigo porque eres un poeta sublime y un hombre genial.

Besos!!!

Jesús Arroyo dijo...

Hola Jose:

Mira si hay mundos que yo estoy en uno de escayola.

Bueno Zuñi, bueno.

Adolfo González dijo...

A veces, la tristeza no tiene un porqué. Viene porque sí, sin más. Se supone que un celador debe vigilar y apoyar, pero no poner triste por ello. Si el celador blanco es el verso blanco del poema, ya tienes motivos para compensar la tristeza que a todos nos viene de vez en cuando, pues él debería vigilar tu tristeza y darte apoyo. Si no, mal celador será.
Que el blanco celador se lleve tu tristeza en la camilla y que te deje a solas con la enfermera de la alegría.

jorge dijo...

Aveces consigue usted despistarme.

Pero eso es lo que suele acontecer cuando se escribe desde una tristeza pegajosa.

Habra que echar unas risas.

..y no te calles, que me gusta leerte.

Unknown dijo...

Ahora, espero el amanecer, después de la tarde de locura y la noche con el celador, no sé que pueda suceder al alba.
Un abrazo.
Leo

Paloma Corrales dijo...

No sé si ajeno o enajenado, pero es tan sencillo y tan cercano que se queda en la sangre.

Quizá no sea un apéndice de "esta tarde" y nació solo (sin acento y de soledad), pero se puede leer como tal y voltea.

Buenos días tenga usté.

Rosa dijo...

No sé si es una pesadilla, querido José, pero para mí, leerte, ha sido un despertar adorable.

Gracias por ello... Me ha gustado la sencillez del poema y sus imágenes intensas.

Un beso

Laura Caro Pardo dijo...

¿ Y cuántos son de este mundo? El mundo que creemos mundo no existe.
Un abrazo, Zú.

Jose Zúñiga dijo...

Soñar es gratis, Isolda. Lo poer es cuando te despiertas envuelto en extrañas sensaciones.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

Siempre hay un mañana, charcos.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

Esta noche es cuaquier noche, Holiveira; pero podría ser ayer, o mañana.
Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Cuentas bien, Ame, ya hablaremos.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

¿Qué pasó, Jesús? Cuenta...

Jose Zúñiga dijo...

Siempre es preferible una enfermera, Adolfo. Pero es más triste un celador. Y hoy era la tristeza la protagonista.
Pasará.

Jose Zúñiga dijo...

No callaré así me muera, Jorge, sobre todo si a veces logro despistarte.
Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Nada bueno, Leo...

Jose Zúñiga dijo...

Creo que sí, Paloma, creo que es un apéndice; enajenado más bien.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

A veces hasta en las pesadillas salta la chispa, Rosa. Ya hemos vuelto.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

Al, la caverna de Paltón, Laura!
Bs

María Socorro Luis dijo...

Tiene algo de místico?...

Besos de este mundo.

Jose Zúñiga dijo...

Los locos y los m´sticos siempre fuueron de la mano, Soco.
Muxus terrenales

Amaya Martín dijo...

A veces es lo que deseamos que sea. un beso

VICTOR VERGARA dijo...

Me gusta, Jóse.

UN ABRAZO.

Jose Zúñiga dijo...

En el fondo el deseo es el motor de la vida, Amaya.
Bss

Jose Zúñiga dijo...

Seguimos con el devenir del día, Víctor.
Abrazo